Com o cair da noite, um manto vermelho paira sobre o céu que reflete nas águas deste rio poderoso, tornando-se um dos dois elementos. Mientras tantos sus habitantes se disponen a finalizar la faena diaria mientras vuelven, plácidamente, a sus hogares. Es uno de los momentos más esperados de la jornada que da paso, desde el bullicio, a una atmósfera de paz y recogimiento.
Para nosotros este será nuestro último atardecer en Vietnam, mientras nos dirigimos al poblado Champa, nuestra última visita en un país que hemos aprendido a amar por la fuerza de su cultura, la belleza de sus paisajes y la calidez de sus habitantes.